Castas arias. Por David Myatt

Todas las antiguas sociedades arias, es decir, aquellas sociedades basadas en costumbres arias y que defendían el ethos ario, reconocían instintivamente que hay tres castas o tipos naturales de arios. De hecho, tales sociedades normalmente se basaban en dicha división. En términos simples, los tres tipos arios naturales -los tres tipos naturales de personalidad aria- eran los guerreros, los artesanos y los sacerdotes / sacerdotisas. Entre los artesanos se incluyen individuos como los agricultores, expertos en lo que solía llamarse la «labranza del suelo». El tipo religioso se ocupaba del conocimiento y, en ocasiones, de la curación. En tales sociedades antiguas, el trabajo apropiado para cada tipo era respetado, recompensado y considerado necesario para el correcto funcionamiento de la sociedad en su conjunto.

Una descripción mejor, más consciente, de los últimos dos de los tres tipos arios fundamentales y naturales sería la del «trabajador popular» y «apolíneo». Un trabajador popular es alguien cuyo interés principal, motivación, talento u obligación radica en el trabajo productivo o el empleo que se desarrolla en beneficio de su propio pueblo en conjunto. Esto incluye a personas como agricultores y madres, y en muchos sentidos el trabajador popular es el pilar y parte vital de una sociedad sana y natural. Un apolíneo es alguien cuyo principal interés, motivación, talento o deber radica en descubrir, explorar, comprender, utilizar o dar a conocer el orden racional del cosmos. Esto incluye a personas como científicos, ingenieros, exploradores, maestros y aquellos dedicados a la profesión médica. La palabra «apolíneo» se deriva del nombre del antiguo dios griego Apolo, el dios del razonamiento, la curación y el conocimiento.

Así, las tres castas arias fundamentales son: la casta guerrera, la casta apolínea y la casta de los trabajadores populares. En efecto, el trabajo o deber de cada casta refleja los tres tipos fundamentales de individuos arios, y cada ario realiza el trabajo o el deber apropiado de su casta en particular, entonces el conjunto general se encontrará más saludable y próspero que si se hiciera de otro modo. Esto es así porque el trabajo o el deber apropiado para cada casta refleja lo que es natural y saludable para nosotros, como arios, y nosotros como individuos somos más saludables si vivimos nuestras vidas de manera en que usemos y desarrollemos nuestras habilidades y talentos innatos o naturales. Además, si hacemos esto, también estaremos mejorando o evolucionando nosotros mismos y contribuyendo a la evolución de nuestra cultura aria y, por tanto, de nuestra propia raza aria. En otras palabras, estamos cumpliendo el propósito verdadero o natural de nuestras vidas.

Es el propósito, y por lo tanto el deber, de cada individuo desarrollarse a sí mismo y a su propia raza: ayudar y participar en su propio desarrollo personal, y ayudar y participar en el desarrollo de su raza y, por tanto, de su propia cultura. Puede hacerlo emprendiendo el trabajo o el deber de la casta aria que mejor se adapte a su propio carácter, y esforzándose por crear una sociedad evolutiva, o Reich, basada en esta sabiduría natural del deber.

Para crear una sociedad verdaderamente evolutiva, una sociedad donde se alcancen valores civilizados, donde florezca la cultura y donde se logre un progreso creciente y se produzcan individuos mejores y más civilizados, los tres tipos básicos deben ser aceptados como punto de partida. Esto significa que el espíritu y el deber de cada tipo, o casta, no solo sean reconocidos, sino que formen la base de la educación y la formación en una sociedad, o Reich, de este tipo, con el trabajo o la ocupación de cada casta siendo respetado y recompensado. En general, dicho Reich buscaría dignificar y recompensar todo el trabajo realizado por los individuos que lo forman. Así, todos los que cumplan con su deber serían respetados y recompensados.

En una sociedad tan evolutiva, el individuo desarrollará sus talentos innatos o naturales, y su carácter innato natural, al elegir unirse a una de estas tres castas. La educación de los niños estará orientada a la enseñanza de los fundamentos y el espíritu de cada casta. Por lo tanto, habrá un entrenamiento tanto de tipo guerrero o militar / aventurero, como una formación en ciencia y cultura. También habrá capacitación en habilidades más prácticas que un futuro trabajador popular pudiera necesitar. El objetivo fundamental o primordial de una educación tan temprana será producir hijos de carácter noble, bien versados ​​en su propia cultura y en las artes de la civilización en general. A partir de estos fundamentos esenciales, comunes a todos, el individuo puede elegir capacitación adicional en uno o más de los gremios, asociaciones o instituciones creadas para supervisar el trabajo asociado a cada una de las castas. De este modo, el individuo podrá desarrollar sus propios talentos y carácter innatos de una manera natural y productiva y, de ese modo, tal desarrollo lo beneficiará tanto a él personalmente como a su pueblo y a su propia sociedad. En esta sociedad, las asociaciones profesionales, los gremios y las instituciones establecerán y mantendrán altos estándares, estando dichos grupos dedicados al bienestar de sus miembros.

Es importante comprender dos cosas sobre la estructura de castas y las organizaciones basadas en dicha división. La primera es que dicha estructura solo existe para nutrirse, desarrollarse y ser usada al servicio del pueblo, de los talentos naturales y del carácter natural de los individuos de la sociedad, o Reich, con individuos que tienen el derecho fundamental de tomar la decisión para sí mismos acerca de qué casta es la más adecuada para ellos, y así poder prepararse para emprender el trabajo realizado por dicha casta en caso de que el individuo cumpla con los estándares establecidos. También existiría la posibilidad de que los individuos, en caso de que poseyeran las aptitudes o habilidades necesarias, se transfieran a otra casta y, de este modo, se unieran a otro gremio o asociación, y sean formados por dicho gremio o asociación. Por lo tanto, estas estructuras creadas son flexibles y están diseñadas para desarrollar a los individuos de forma natural. Lo que puede garantizar estructuras tan flexibles y humanas, y de hecho lo que garantiza que tal sociedad funcione, es la búsqueda de ideales nobles por parte de los miembros individuales de dicha sociedad. Es decir, que las personas sean conscientes de su propio deber hacia su pueblo, mientras tratan de vivir de manera noble y honorable. Uno de los objetivos fundamentales de tal Reich es crear tales individuos civilizados y honorables, y tener solo a esos individuos en las posiciones de autoridad e influencia.

Lo segundo que debe entenderse acerca de esta estructura de castas es que dicha estructura es necesaria para garantizar el bienestar del pueblo. Los individuos mismos solo son verdaderamente saludables si tienen un propósito. Para la mayoría, esto significa un trabajo útil, interesante, gratificante y productivo. Lo que es interesante y personalmente gratificante para la mayoría de las personas es un trabajo en el que poder hacer buen uso de sus talentos y habilidades naturales, y que les permita desarrollar esos talentos y habilidades al máximo. La sociedad debe proporcionar dicho trabajo o empleo, y así proporcionar a las personas el respeto y la gratificación necesarios. Así, una estructura de castas flexible y, por tanto, humana, es un medio para crear y mantener individuos sanos y dichosos y un Reich sano y próspero.

Dado que esta estructura de castas refleja el carácter ario, y dado que una sociedad basada en dicha estructura de castas es un medio para que este carácter evolucione de una manera civilizada, es importante darse cuenta de que el trabajo o el deber asociado a cada casta es igualmente necesario y igualmente importante. Es decir, ninguna casta es fundamentalmente «mejor», o «más aria», que cualquier otra, así como el trabajo de un gremio de una casta en particular no es más importante que el trabajo de otro gremio de la misma casta. Una sociedad evolutiva, o Reich, es fundamentalmente un tipo completamente nuevo de sociedad donde los tres aspectos esenciales del ethos ario se hacen conscientes y se combinan para producir un mayor desarrollo y una mayor evolución. Tal sociedad es una manifestación voluntaria y consciente del ethos ario y, por lo tanto, una intervención natural, positiva y creativa en la evolución. Tal Reich es una sociedad orgánica, una sociedad viva y en crecimiento, donde cada parte individual es tan importante y tan necesaria como las demás. Todo el organismo solo funciona y es sano y próspero si todas las partes cooperan voluntariamente para su propio bien. Por lo tanto, no todos los miembros individuales de esa sociedad son aptos para ser guerreros. Además, no todos los miembros de dicha sociedad deberían ser de la casta guerrera. Lo importante es mantener el equilibrio correcto que es necesario para que la sociedad y las personas que la integran se mantengan sanas y puedan crecer. Lo necesario para mantener ese equilibrio humano son individuos nobles y honorables que sean conscientes de la sabiduría natural. Esta sabiduría natural hecha consciente es el nacional-socialismo mismo. Por lo tanto, son los nacionalsocialistas, individuos poseídos por la sabiduría y el carácter noble, quienes no solo pueden construir o crear una sociedad tan evolutiva, sino quienes pueden mantenerla.

Sin embargo, antes de que se pueda crear una sociedad evolutiva de este tipo, y así continuar la evolución, la sociedad actual debe destruirse. Esta sociedad actual es fundamentalmente antievolutiva y antiaria, ya que quienes la controlan y mantienen se dedican a erradicar el espíritu ario mismo y a convertirnos en esclavos domesticados.

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